Business Model Creation: más allá del Canvas
 – parte 2

Generalidades

Ésta es la segunda nota sobre la serie corta enfocada en la “formulación de modelos de negocios”.  En la primera entrega, se trató brevemente el módulo de “mecanismos de generación de ingresos”, y hoy, se abordarán tres módulos que le son muy cercanos: “estructura de costos”; “actividades clave”; y “recursos clave”.

Estructura de costos

Ésta es una de las tareas más complejas de ejecutar, pues en la mayoría de los casos, simplemente se listan (sin asignar valor monetario) los elementos que intervienen en la construcción directa de la oferta, es decir los elementos que conforman el costo directo.  Para ir “más allá del Canvas”, el equipo emprendedor debe identificar los costos (directos) y los gastos (operativos) relacionados con el proyecto emprendedor y asignarles valores monetarios para estimar su costo unitario y después asignar un precio unitario adecuado y competitivo.  En resumen, es recomendable que se elabore una lista detallada de todos los componentes y gastos operativos que servirán para construir y entregar la oferta al cliente, sin importar si se trata de un producto o un servicio.

Típicamente, se distinguen dos clases generales de enfoque cuando se realiza el análisis: (i) enfoque en costos; y (ii) enfoque en valor.  En el primer caso, las organizaciones se enfocan en disminuir costos y gastos en donde sea posible (ej. compañías aéreas de “precio bajo” que eliminan el servicio completo de comida).  En el segundo caso, las empresas se concentran en crear valor a través de la entrega de elementos “premium” o personalizados (ej. visitas turísticas guiadas).  En cualquiera de los dos casos, el cliente y/o consumidor debe ser capaz de reconocer el valor que buscan entregar; ya que, de otra forma, el objetivo no se habrá logrado y no existirá diferenciación.

Actividades clave

La construcción de este módulo se centra en identificar las acciones más importantes que debe (o deberá) ejecutar la organización, o emprendedor, para que su modelo de negocio funcione.  Sin embargo, en el uso clásico de la metodología Canvas, el ejercicio concluye simplemente con una lista de actividades, que no contempla tiempo de ejecución, nivel de inversión, ni capital humano involucrado.

Para que la actividad entregue el valor esperado, es recomendable ir “más allá del Canvas” y no sólo se listar las actividades, sino también fijar objetivos de tiempo de ejecución; identificar inversiones relacionadas; y reconocer si la actividad puede ser ejecutada de forma interna.  Por ejemplo, una actividad clave correctamente expresada se podría leer así: identificar, evaluar, y seleccionar a experto que apoyará en la formulación y protección del portafolio de propiedad intelectual de la empresa.  El tiempo asignado será de 6 semanas.

Recursos clave

El último de los módulos comentados el día de hoy tiene gran importancia en el avance en el ciclo de vida del proyecto emprendedor, pues su carencia o incapacidad para adquirirles puede significar que éste se rezague, pierda su ventana de oportunidad, o se abandone.

Los recursos clave, que se refieren a los elementos que permiten a la organización crear, ofrecer, y obtener valor a partir de su oferta, se pueden agrupar en cuatro clases: (i) tangibles; (ii) intelectuales; (iii) humanos; y (iv) económicos.  Los recursos tangibles incluyen edificios, maquinaria, vehículos, etc.; los recursos intelectuales agrupan conocimientos, marcas, patentes, derechos de autor, bases de datos de clientes, certificaciones, etc.; los recursos humanos integran al personal clave; y los recursos económicos comprenden dinero, líneas de crédito, acciones, etc.

Para ir “más allá del Canvas” y no sólo listar estos elementos, la organización emprendedora deberá ser capaz de identificar y cuantificar el nivel de inversión requerido para adquirir aquellos recursos que no posee la organización (ej. maquinaria para corte y técnico especializado en el uso de ésta).  También, será importante estimar la probabilidad de asegurar los recursos económicos, pues no es lo mismo una inversión de MXN$10 mil que una de MXN$10 millones.  Finalmente, será imperativo establecer que recursos ya han sido formalizados contra aquéllos que se encuentran en proceso de obtención o sólo han sido identificados.  En resumen, el proyecto emprendedor deberá alinearse a objetivos de adquisición y uso de recursos alcanzables.

Te invito a que regreses al blog semanalmente para que continúes leyendo temas interesantes para el ecosistema emprendedor y sigas disfrutando de las series ¿Sabías esto…? y Business Model Creation.